Pedro Solbes, ministro de economia y hacienda, ha perdido muchos enteros ante la opinión pública española

Es lo que toca. Apretarse el cinturón gracias a los especuladores sin escrúpulos y a la alegria económica de bancos y financieras internacionales. Lo malo es que siempre somos los mismos y los primeros en tener que apretarnos el cinturón cuando las economías se tambalean y vienen tiempos de crisis y futuros inciertos.

Las primeras medidas que se han tomado por parte de todos los gobiernos ha sido abocar dinero a raudales precisamente en las arcas de los ricos, de los que manejan los hilos de las transacciones económicas, de los fondos bancarios y financieros. Ellos se ahogaban pobrecillos despues de ser los únicos responsables de esta catástrofe económica pero tambien laboral.
La sociedad a mirar y a callar, y aún tenemos que dar las gracias los que conservamos nuestros puestos de trabajo y para los que se van al paro el subsidio hasta que se les termine. ¿Y después qué?.

Nos dicen que consumamos para revitalizar la economia productiva. ¿Pero como vamos a consumir si no hay futuro seguro, y no sabemos que va a pasar mañana cuando nos levantemos?. ¿Con qué alegria se puede ir de compras con los bolsillos temblorosos y medio vacios aunque estemos a las puertas de las fiestas navideñas y con la proximidad de la fiesta de los Reyes?. Hace poco más de un dia que ya se habla del bajón de un 10% de ventas de una reconocida marca de cava catalán. Los comerciantes especializados en jugueteria y artículos de regalo ya se han curado en salud, y han encargado menos productos que en años anteriores para poner a la venta en sus comercios. A apretarse el cinturón toca, y bien ceñido, no sea caso que con las dietas forzosas que muchos tendran que hacer no se les caigan los pantalones en medio de la calle.

Hay que joderse.
El ministro Pedro Solbes con su politica económica que ha desconcertado a muchos y ha desengañado a muchos más, realmente ha perdido muchos enteros entre la opinión pública tanto de España como entre los gobiernos de países europeos. Desde el gobierno español se ha reaccionado titubeando primero, ocultando la realidad después y tomando medidas para afrontar esta gravisima crisis a golpes torpes de timón.